
Extraño tus turbios y temblorosos parpados. Aterrorizada me encuentro por descuidarme y nuevamente encontrarme flotando, en ese instante, en que tu corazón inseguro sale de mi boca, y nos disfrutamos a solas, el cielo recoge sus dedos, agujas de agua, le doy gracias por dejarme falsificarte a besos, mientras tú me atacas con tu limpias pinceladas que ensucian mis miedos, atraviesan a la oscuridad que me respira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario